¡¿Como tú por aquí?!
¡Milagros a Lourdes!
¿Qué tal?
Soy La Lourdes. Una Agencia Creativa.
Una agencia de publicidad no. De marketing tampoco.
Una Agencia Creativa.
Una Agencia Creativa para proyectos y empresas que quieran cambiar el mundo. Que quieran servir a algo más grande, empezando por su cliente.
Una Agencia Creativa para proyectos y empresas valientes, atrevidas y juguetonas.
Creo cosas.
Cosas con alma.
Cosas que sorprenden.
Cosas divertidas.
Cosas que hacen sentir.
Cosas que devuelven a la alegría a quien las experimenta.
Y vendo esas cosas, claro.
Si… Puedo oír desde aquí a esa vocecita de tu cerebro diciendo:
“Pero… ¿qué tipo de cosas haces?”
“¿Qué creas exactamente?”
“¿Una página web en blanco para una agencia creativa?”
“Un poco de color, por favor…”
“¡Déjame ver tu portfolio para hacerme una idea!”
Caaaaaalma.
Te lo voy a mostrar.
Todo a su debido tiempo…
Pero antes, te cuento cómo, en 62 segundos.
Llamamos milagro a eso que creemos imposible que suceda.
Y para eso vienen a mí.
De entrada, te voy a confesar que, no puedo explicarte cuan única soy creando.
Bien.
Poder, podría.
Pero no lo voy a hacer.
Porque carecería de sentido quedarse en lo mental del asunto.
La Creatividad se reconoce como la capacidad de provocar algo en los demás, de mover emociones, de desatar la fascinación por la capacidad humana en el otro.
Y eso se puede hacer de muchas maneras.
No solo con colorines, imágenes y sonidos.
Aunque también.
Y eso es lo que quiero que experimentes.
Así que, mejor te muestro mi web oculta y mi creatividad, de manera creativa.
Y será con un juego.
Un juego en formato e-mails.
Si quieres jugar, deja tu mail en la cajita de abajo, dale al botón y ¡listos!. Estarás dentro.
Puedes no hacerlo.
Y estará bien.
Y eso significará que no recibirás mis e-mails y no verás nunca mi web.
Y lo mismo, te estarás perdiendo de una fuente de inspiración y entretenimiento.
¿Te perderás la rocambolesca historia de mi nacimiento, de por qué me llamo La Lourdes y por qué acuden a mí para milagros?
¿Podrás resistirte a conocer la gran hostia del Universo que, por fin, me hizo salir del armario?
¿Te pica la curiosidad saber por qué dejé al cliente al que más facturaba?
¿Aguantarás saber cómo conseguí que la empresa para la que quería trabajar me contactara, sin hacer ninguna llamada ni mandar ningún mail?
¡Esto sí habla de creatividad!
Y de esto irán los mails que recibirás.
¿Te quedas?
¡Nos vemos en el primer mail, que casi seguro lo encontrarás en el SPAM!
¡Hasta mañana!
La Lourdes
